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A escasos kilómetros de la capital Sevillana, dentro en un triángulo de cinco kilómetros de lado, el Aljarafe Norte constituye un excepcional territorio cultural cargado por una sorprendente multitud de valores patrimoniales superpuestos, que nos llevan desde la prehistoria a la contemporaneidad, y que dentro del Área Metropolitana de Sevilla conforma uno de los reductos culturales, medioambientales y paisajísticos de mayor interés y valor.
En un corto viaje es posible conocer el mayor yacimiento de la Edad del Cobre conocido, el emplazamiento del santuario fenicio-tartessio más occidental del mediterráneo, la primera ciudad romana fundada fuera de Italia y cuna de míticos emperadores, el impresionante monasterio medieval donde se tradujo por primera vez la Biblia al castellano y donde se haya sepultado Guzmán el Bueno, los Jardines de Forestier, obra del maestro que marcó el estilo ecléctico de la jardinería sevillana, haciendas, templos. A ello se suman las haciendas tradicionales con sus torres de contrapeso, las iglesias y ermitas dueñas de un rico patrimonio artístico. Fuertemente cargado de Historia, en el Aljarafe Norte prevalece la huella de las figuras como rey Argantonio, Escipión el Africano, los emperadores Trajano y Adriano, el caudillo musulmán Almanzor, Guzmán el Bueno, o el Conde Duque de Olivares.
Por otra parte, la posición del territorio en la confluencia de cuatro entornos medioambientales diferenciados (campiña esteparia, valle fluvial, meseta, y escarpe de la cornisa) hacen que la riqueza y diversidad ecológica y la excelencia paisajística añadan valor patrimonial, haciendo que todo ello en unión configure un verdadero territorio-museo.
El desconocimiento general de esta realidad por parte de los propios habitantes de los municipios, en gran parte de origen alóctono como resultado del crecimiento urbano de las últimas décadas, hace necesario que existan cuantas estrategias de difusión y experiencias puedan contribuir a mejorar esta carencia y simultáneamente a preservar el Patrimonio para su legado futuro.
La creación de un Parque Cultural uniendo conceptualmente todos los valores patrimoniales diacrónicos y superpuestos del territorio, al amparo de la Ley del Patrimonio de Andalucía 14/2007, y recogida y prevista en el P.O.T.A.U.S. (Plan de Ordenación del Territorio de la Aglomeración Urbana de Sevilla) induce a activar desde el plano público planes de colaboración intermunicipal que propicien el desarrollo del citado Parque Cultural como garante de la prevalencia del Patrimonio como seña de identidad común de sus municipios y factor de sostenibilidad económica y medioambiental.
El patrimonio cultural es el único recurso no deslocalizable ni intercambiable del que disponemos, es por ello por lo que la divulgación, la conservación, y la protección de los bienes culturales, además de una responsabilidad ineludible, es una oportunidad inigualable de generación de riqueza y de reforzar la identidad cultural de sus habitantes.
La Red de Centros de Guadalinfo de las tres localidades implicadas poseen la estructura conceptual y disposición de medios adecuados para emprender actividades compartidas que contribuyan eficazmente a generar concienciación y expectativas en la sociedad, que vayan dirigidas en este caso a garantizar el desarrollo sostenible de la economía basados en la preservación del patrimonio y la identidad cultural.
